En este artículo:
- Daniel Radcliffe confesó que originalmente tenía la intención de dirigir él mismo el documental The Boy Who Lived, el cual se centra en la historia de David Holmes, doble de riesgo que sufrió un fatídico accidente durante la producción de Harry Potter.
- El actor dijo que filmó algunas escenas porque “creía que sabía lo que estaba haciendo”, pues también buscaba hablar del mundo de las acrobacias de riesgo en general.
- Al final, se dio cuenta de que él no era el indicado para dirigir la historia, y que su documental debía estar centrado enteramente en la historia de David Holmes.
Daniel Radcliffe presentó el nuevo documental de HBO, David Holmes: The Boy Who Lived, que narra la vida de David Holmes, quien se convirtió en el doble del protagonista de Harry Potter en varias de la películas de la franquicia hasta que, durante la preproducción de Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, tuvo un fatal accidente que lo lesionó de la columna, dejándolo paralizado desde entonces.
Años después, Radcliffe se dispuso a crear un documental para exponer la vida de su amigo y asumió el papel de productor ejecutivo pero, en realidad, en un principio quería hacer su debut como director con el proyecto. ¿Por qué se alejó de esa idea? A continuación te lo platicamos.
Daniel Radcliffe quería buscar al director perfecto para el documental
Durante una conferencia para el estreno del documental, Daniel Radcliffe, reveló que inicialmente se propuso para dirigir él mismo la película porque siempre tuvo la inquietud de compartir la historia de David, aunque también buscaba crear una historia sobre el mundo de los dobles de acción. Sin embargo, “la humildad natural” de su amigo hizo que se diera cuenta que debía ser el centro de la historia. “Finalmente lo convencí de que él debería estar al frente y al centro de todo esto”, dijo Radcliffe.
Radcliffe admitió que “por alguna razón, pensé, aunque nunca antes había hecho algo así, que podía dirigir un documental” y filmó un par de escenas. Pero al final se dio cuenta que no era el indicado para hacerlo. “Resulta que no lo hice. En absoluto”, insinuando que la historia que había pensado originalmente no funcionó.
En cambio, buscó a un cineasta con más experiencia: Dan Hartley, que había dirigido previamente el drama Lad: A Yorkshire Story en 2013 y ya había trabajado tanto con Daniel Radcliffe como con David Holmes.
“Queríamos a alguien que conociéramos y que conectara con el material de la misma manera que nosotros. Teníamos un poco de miedo de que alguien externo entrara con un lente un poco más superficial”.
Daniel Radcliffe
Si bien Hartley no tenía experiencia en documentales, Daniel Radcliffe confiaba plenamente en su visión como director y sensibilidad para retratar historias. “Hablábamos de todos los documentales que nos encantaban y estábamos en la misma página”, explicó el actor. “Luego Dan filmó un par de tardes de entrevistas y nos las mostró, y desde ese momento quedó muy claro”.
Después Daniel Radcliffe le mostró a Hartley las imágenes que había filmado, y él muy amablemente dijo: “’si quieres hacer un documental que sabes que se ve bien, probablemente deberías empezar de nuevo’” y así lo hicieron. “Él simplemente dio en el clavo e hizo la película que ves frente a ti”.
David Holmes espera que el documental transmita esperanza
Desde temprana edad, David Holmes fue gimnasta y gracias al coordinador de especialistas Greg Powell, fue que ingresó al mundo cinematográfico, siendo Lost in Space de 1998 su primer trabajo como doble. Unos años más tarde, se unió a las películas de Harry Potter y formó una importante amistad con Daniel Radcliffe.
Años después de su accidente, para Holmes es muy importante compartir su historia porque espera que los/as espectadores/as se lleven de este documental esperanza, dando como referencia la letra de la canción “August” de Taylor Swift en donde menciona: “Vivir por la esperanza de todo” ya que para el actor lo importante es siempre buscarla “y lo último que debes dejar ir”.
También considera conveniente que con la llegada del documental cada vez más personas se muestran vulnerables ante una cámara para expresar nuestros sentimientos. “El apoyo colectivo que me permitió vivir mi vida y también lo que podemos crear cuando todos confiamos, nos amamos y somos abiertos”, agregó. “Es lo que nos hace humanos, y nadie debería avergonzarse de ello de ninguna manera. Son las cicatrices de la vida las que nos hacen quienes somos”.
